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| Immoral Mathematics Temporada 1 » Episodio 02 | |||
| Emisión original | 13 de noviembre de 2011 | ||
| Escrito por | Tony y Joe Gayton | ||
| Dirigido por | David Von Ancken | ||
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| Galería de imágenes | |||
"Immoral Mathematics" es el segundo episodio de la primera temporada de Hell on Wheels. Fue emitido originalmente el 13 de noviembre de 2011.
Cullen trata de salvar su vida mientras tiene que responder por sus acciones. Lily se esfuerza por sobrevivir en territorio salvaje. Durant trata de distorsionar la tragedia para obtener beneficio político.
Introducción[]
Durant en el campamento.
Durant llega al campamento de los topógrafos mientras se encargan de limpiar el sitio y ordena a un fotógrafo que trabaja para el periódico a que manipule la escena para que todo parezca más dramático.
El cuerpo de Robert Bell acaba siendo encontrado en el bosque, pero no hay rastro de sus mapas. Cerca de allí, Durant descubre un reloj de bolsillo con la fotografía de Lily Bell en su interior y se queda con él, pensando en la posibilidad de que ella siga viva.
Historia[]
Dos hombres van hacia el grupo de trabajadores del ferrocarril para recoger a Cullen y llevárselo a ver al Sueco bajo el pretexto de que Cullen es uno de los candidatos para reemplazar a Johnson como capataz del ferrocarril. Sin embargo, una vez allí, El Sueco – jefe de la seguridad de infierno sobre ruedas – empieza a cuestionar a Cullen respecto al asesinato de Johnson.
El Sueco en principio piensa que podría ser obra de los liberados, pero Cullen se niega a implicarles en ello, de modo que asumen que él es el culpable. Cullen trata de escapar, pero El Sueco saca un arma para amenazarle y los hombres le encadenan dentro de un vagón de locomotora. "Vamos a darte una oportunidad para que confieses," le dice El Sueco. Entre los agujeros de los laterales del vagón, Cullen observa el cuerpo de un ladrón de caballos, ahorcado por su delito.
En Nebraska, Lily se esconde entre la maleza en torno al río Missouri para eludir a los tres guerreros Cheyenne que la buscan.
En el vagón, Cullen observa un clavo del entarimado medio suelto e intenta arrancarlo. Mientras lo hace, pasan por su mente recuerdos de su hogar en Meridian, donde su mujer cosía un bordado en el porche.
Lily descansa tras el tronco.
Joseph, vestido con traje, encuentra a los guerreros Cheyenne responsables por la masacre. Uno de ellos es su hermano, Pawnee Killer. Joseph les avisa de que los hombres blancos querrán venganza si ellos capturan a una mujer blanca, pero esto no le importa a Pawnee Killer, que le recuerda de que hubo un tiempo en el que él también se dedicaba a arrancarles los cueros cabelludos a los enemigos. Pawnee Killer le dice que Jesús puede haberle perdonado, pero se pregunta si sus amigos los hombres blancos harán lo mismo.
Al anochecer, Elam se acerca sigilosamente al vagón y pregunta al prisionero Cullen si planea testificar en su contra. En cuanto Cullen afirma no haberlo decidido, Elam amenaza con revelar lo que oyó a Johnson decir acerca de los otros tres hombres asesinados por Cullen. Cullen sin embargo le pide que se relaje ya que planea escapar de allí.
El Sueco en el espectáculo de linterna mágica.
El Sueco visita el espectáculo de linterna mágica de los hermanos McGinnes y parece estar conmovido, aunque posteriormente les avisa de que tienen que pagarle dinero para que proteja su carpa.
En el vagón a la mañana siguiente, El Sueco entra y empieza a comerse lentamente un plato de alubias mientras describe su vida previa como contable. Tras ser encarcelado como un prisionero de guerra sureño, El Sueco empezó a practicar una serie de "matemáticas inmorales" para controlar a las personas. "Hice cosas no muy buenas," admite.
Cullen insulta al Sueco y golpea el plato, haciendo que se caiga al suelo junto con la cuchara. "Prepárate para conocer a tu creador," le dice El Sueco justo antes de salir a preparar la horca. Cullen consigue coger la cuchara y la utiliza para poder sacar más clavos del entarimado. Momentos después, Cullen logra escapar por el hueco del suelo justo en cuanto El Sueco regresa al vagón.
Durant y el periodista.
Durant, viajando en un carro con los cuerpos de las víctimas de la masacre, dicta un texto para el periódico, describiendo la matanza de "ocho blancas almas cristianas" por salvajes sedientos por sangre que han "mancillado" y aprisionado a Lily Bell, la "rubia dama del Oeste".
Hace falta que las tropas federales acaben con los indios para que Durant y su ferrocarril puedan civilizar el territorio.
Lily se despierta y descubre que los indios ya no están, dedicándose luego a coserse su propia herida de la flecha con una aguja improvisada y un hilo. Al acabar, se desmaya debido al dolor.
Escondiendo sus cadenas con el sombrero, Cullen se desplaza por infierno sobre ruedas y entra en la iglesia para esconderse de los hombres que le buscan. El reverendo Cole reconoce la identidad de Cullen, pero sale afuera a despistar al Sueco, evitando que pase adentro. Tras marcharse El Sueco, Cole trata de hacer que Cullen se arrodille y ruegue el perdón de Dios antes de ser ahorcado, pero él se niega. "No merezco el perdón," explica.
A pesar de las objeciones de Mickey, Sean coge dinero de un escondite secreto que mantienen para poder pagar al Sueco. Mickey alude a un acontecimiento similar que pasó con los dos en Boston, pero Sean le recuerda que solucionó aquello y jura hacer lo mismo ahora, a pesar de aún no estar seguro de la forma de hacerlo.
En su carpa, Elam utiliza un martillo para romper las cadenas de Cullen justo cuando los hombres del Sueco se acercan, logrando escapar una vez más.
En cuanto Lily recobra la conciencia, memorias de ella con Robert aparecen y desaparecen junto al brumoso presente. Pawnee Killer observa a buitres volando por el cielo y empieza a buscar a Lily, sabiendo que se encuentra cerca. Al oír a los caballos, Lily vuelve a esconderse en el bosque, donde Joseph la agarra y le tapa la boca para que no haga ningún ruido hasta que pasen los otros indios.
El Sueco se reúne con Durant en cuanto el carromato se acerca por el prado. Durant ordena al Sueco que ofrezca una recompensa de 100$ a cualquiera que encuentre a Lily, aunque le pide expresamente que no diga una sola palabra sobre los mapas.
Al regresar a su Pullman, Durant es sorprendido por Cullen, que de forma temeraria solicita el trabajo de Johnson. Comparando la construcción del ferrocarril con la batalla, Cullen habla acerca de su habilidad a la hora de motivar a tropas superadas en número durante la Guerra Civil y señala el actual dilema de Durant: su subsidio gubernamental no se produce hasta que se alcancen las 40 millas de vías. Cullen enfada a Durant al aludir a algunas de sus acciones en la guerra, aunque acaba consiguiendo el trabajo.
El Sueco observa como Cullen sale del Pullman y le amenaza, pero Durant le detiene. "Este es mi nuevo capataz," anuncia. "Encuentra a algún otro para la horca."
Todas las pertenencias de Johnson siguen en su carpa cuando Cullen entra para asentarse. Cullen observa su alrededor y luego saca algo del bolsillo de una chaqueta: es el bordado que cosía su mujer en Meridian.
Reparto[]
Actores principales[]
- Anson Mount - Cullen Bohannon
- Colm Meaney - Thomas Durant
- Common - Elam Ferguson
- Dominique McElligott - Lily Bell
- Tom Noonan - Reverendo Cole
- Eddie Spears - Joseph Black Moon
- Ben Esler - Sean McGinnes
- Phil Burke - Mickey McGinnes
Actores invitados[]
- Ian Tracey - Bolan
- Diego Diablo del Mar - Dix
- Dave Trimble - Hombre de Durant #1
- Tefari Thompson - Liberado
- Bruce Ramsay - Periodista
- Dave Brown - Jefe de grupo
- Kassia Warshawski - Mary Bohannon